Los cardos negros
"Los
cardos negros en el aire
punzan
pechos blancos de
tela
manchados de sangre seca.
Cardos
negros de pena negra
que
buscan cuerpos almidonados
para
profanar la pureza de la
sangre
en las venas.
Lindos
a la albura del alma
céntrica,
los cardos negros
se
violentan al ver improfanable
el
amor, la nostalgia y las penas.
Es
el ambiente de los cardos
negros
que todo de negro
impregna:
quien supiera lindar
siempre
con los cardos y vivir
lejos
de manchas de sangre seca.
Quien
supiera ver y no ver
las
manchas de sangre seca
que
los cardos clavados en su
Blanca
tela dejan. Quien supiera
almidonar
tela. Que nada puede
existir
sin montones de cardos
negros
rondando y punzando
su
ya manchada tela."
Y el otro, sin nombre:
Para M.F.S
"La noche se está mirando:
se está mirando las
estrellas,
y allí distraída, se le caen claros
que impregnan el asfalto.
Yo, tan distraído como
ella,
la estoy ignorando.
clavándome aquel nombre en
los dedos, el alma y los
labios.
Mientras tanto, en la remotísima
casa de su voz, se alberga
otro clavo que ya ha sido
redentor.
Y sus dedos, sonidos
resentidos,
rompen con púa los metales
en cuerda
posteriores a mis
vertebras.
Y aquí, rodeado de asfalto
impregnado de albos
claros,
contemplo, absorto, mi clavo"
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